Anna Ade

Anna ADEDesde que yo tenía 14 años, siempre quería hacer un voluntariado en el extranjero para conocer otro país, otra cultura y para aprender un nuevo idioma. Con mi programa de la arquidiócesis de Friburgo y el programa “Weltwärts” todo era posible. Fui al Perú para hacer un voluntariado de un año. Ahora estoy en el Perú hace siete meses, trabajando para la Cáritas de Abancay.

 

Mis primeros meses en Cáritas trabajé en el proyecto de RBC (Rehabilitación Basada en la Comunidad). Aquí hemos trabajado juntos con personas con discapacidades diferentes. Este trabajo me gustaba mucho porque todas personas son muy amables y quieren luchar por sus derechos y sensibilizar a la gente. En diciembre del año 2017 ha terminado este proyecto de RBC y yo empecé a trabajar con niños en las Vacaciones Útiles de Verano 2018. Junto con otros voluntarios de Francia y España, hemos dado clases de ciencias e idiomas (inglés, alemán, francés) a los niños. Aunque algunas veces era muy duro con estos niños porque no querían escuchar, me gustaba mucho enseñar a los niños y ver sus aprendizajes hacia delante. 

Los fines de semana algunas veces fui a campañas médicas o entregas de donaciones. Eso era una buena oportunidad para conocer un poquito la región Apurímac y la población que vive en los pueblos andinos.
En total me gusta mucho el trabajo aquí en Cáritas porque es muy variado y los compañeros de trabajo también son muy amables.
Ya puedo decir, que en estos siete meses he aprendido muchas cosas nuevas y que yo he hecho experiencias que recordaré toda mi vida.          
Quiero decir GRACIAS a Cáritas Abancay, a mis compañeros de trabajo y a todas personas que pude conocer aquí en Abancay.

Muchas Gracias.
Anna